En esencia, todos entendemos lo que debemos hacer para ser más saludables. Necesitamos comer alimentos saludables y ricos en nutrientes. Necesitamos hacer ejercicio regularmente. Debemos evitar los hábitos no saludables como fumar y beber en exceso. Pero, ¿por qué entonces, muchos de nosotros luchamos para hacer las cosas correctas en nuestras vidas a diario? ¿Carecemos de fuerza de voluntad, conocimiento, herramientas o tiempo?

En definitiva, vivir un estilo de vida saludable se reduce a aplicar hábitos saludables. El hábito de construir es diferente a tener que usar fuerza de voluntad cada vez que necesite evitar la galleta o ir al gimnasio. Se trata de reconocer las señales de comportamiento y ajustarlas, adoptaras o adaptarlas, hasta que el nuevo comportamiento saludable sea lo ‘normal’.

Una vez que seas capaz de comprender cómo aplicar hábitos, vivir un estilo de vida saludable se convierte en eso: un hábito.

Aquí hay algunos tips para programar tu cerebro, que te ayudan a ganar algunos hábitos saludables.

Visualiza todo de forma positiva o conviértelo en recompensas.

Por mucho que nos guste ir al gimnasio y “castigarnos” a nosotros mismos, este tipo de mentalidad no tiende a funcionar a largo plazo. La investigación ha demostrado que la visualización positiva es mucho más exitosa para obtener cambios que el “castigo”. Según el científico líder en este campo, B.F. Skinner, para inspirar un comportamiento tiene que haber algún tipo de recompensa para lograr un comportamiento permanente. Y el castigo solo le dice a una persona lo que NO debe hacer, en lugar de crear un nuevo hábito.

Para aplicar esto en tu vida, considera las recompensas positivas que obtienes del hábito saludable. Tal vez, esa caminata de 10 minutos todos los días es una oportunidad para escuchar un audiolibro al que no le habías encontrado tiempo en tu agenda diaria. ¿Preparas diariamente tu batido nutricional OGX FENIX™ para llevarlo al trabajo? Estás ahorrando todo ese dinero evitando comidas poco saludables y caras. Esta acción positiva ya puede ser parte del hábito saludable; solo tienes que concentrarte en él.

Empieza de a poco.

Todos estamos familiarizados con los famosos propósitos de año nuevo. Es el comienzo del año, estás motivado para estar saludable, así que te inscribes a un gimnasio, comienzas una nueva dieta y te comprometes a ser 100% saludable, todo el día todos los días, para siempre. Y luego, en febrero, ya has “fallado”. Pero puede que no seas tú el que ha fallado, sino el plan que trazaste.

Comenzar de a poco con objetivos fácilmente alcanzables tiene algunos beneficios:

  1. Es fácil comenzar con objetivos pequeños. Hacer dos flexiones de brazos, meditar durante 5 minutos, cambiar una comida rápida por un batido nutricional OGX FENIX™, etc., todo eso es fácil de lograr.
  2. Es un momento de impulso. Una vez que hayas establecido el hábito en sí mismo, ya habrás logrado una gran meta. A partir de ahí, puedes aumentar gradualmente la intensidad o agregar otro hábito relacionado. Y la mejor parte, ¡SABES que puedes hacerlo porque ya has tenido éxito!
  3. Tienes una sensación de logro. Esa sensación de fracaso desaparece. QUIERES estar saludable. QUIERES mantener tu dieta. Al establecer primero pequeños objetivos, ganas. Entonces puedes continuar usando esa confianza en tu capacidad de cambiar los hábitos para generar un cambio más positivo.

Desarrolla una rutina de  entrenamiento de “Por lo menos un rato”.

Cada vez que se enfrentan con la razón por la que no hacen ejercicio regularmente, la mayoría de las personas responderán con un “No tengo tiempo”. Si bien podría ser legítimamente una razón para muchas personas, la verdad es que todos podríamos encontrar ALGUNOS momentos para entrenar durante el día. Aquí es donde tener un entrenamiento “Por lo menos un rato” puede mejorar significativamente tu condición física.

En general, es mejor entrenar durante 5 minutos todos los días, consistentemente, que hacerlo durante 2 horas esporádicamente (una vez a la semana, una vez cada dos semanas, una vez al mes, nunca, etc.). Intenta encontrar una rutina rápida de 5 a 10 minutos que puedas hacer todos los días a la misma hora. Tal vez sea justo antes de entrar a la ducha, antes de almorzar o mientras la cena está en el horno, lo que mejor se ajuste a tu horario. Hacer esto todos los días es “mejor que nada” y es posible que te sorprendas de los serios beneficios que una rutina regular genera en tu estado físico.

¿Quieres maximizar esos 5 minutos? Prueba con algún tipo de ejercicio intermitente de alta intensidad para tu entrenamiento de “Por lo menos un rato”. Esto implica hacer algo de alta intensidad (burpees, high-knees, sprints, etc.) durante un período corto (por lo general, alrededor de 20 segundos) con un breve descanso (10 segundos en este ejemplo) y luego repetir las series. En un estudio de 15 semanas realizado solo con mujeres, a la mitad del grupo se le asignó hacer ejercicios de cardio estacionario durante una hora, 5 veces a la semana. La otra mitad se le asignó hacer un entrenamiento de alta intensidad de 4 minutos, cinco días a la semana. Ambos grupos mostraron mejoras significativas en la salud cardiovascular, pero el grupo que hizo ejercicios de alta intensidad en realidad superó al grupo de estado estacionario en la pérdida de grasa y en los niveles de insulina.

Si estás listo para comenzar a realizar cambios reales que conducen a hábitos saludables y duraderos, ORGANO™ puede ayudarte. La línea de productos prácticos y portátiles sumado a pautas útiles, pueden llevarte en el camino correcto hacia hábitos saludables consistentes.

 

Acerca de ORGANO™

Fundada en el 2008 como Organo Gold, ORGANO™ está dedicado a llevar los beneficios y riquezas nutricionales de la tierra a la gente a través de sus productos premium que pueden ser usados diariamente para lograr un estilo de vida más energético y saludable.

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