Sin siquiera darnos cuenta, nuestros hábitos guían nuestras vidas. Lo que hacemos cada día fuera y dentro de nuestra rutina es lo que compone nuestras vidas y lo que nos hace sentir satisfechos por los esfuerzos que realizamos. Cambiar de hábitos para hacer mejor las cosas puede ser frustrante mientras intentamos alcanzar el éxito.
Ha habido incontables libros que hablan sobre el tema de los hábitos, yo por una buena razón. Cuando la gente busca mejorar, busca en gran medida cómo romper con los malos hábitos. La mayoría de la publicidad se fija en dejar de comer alimentos que dañan nuestro cuerpo, dejar de fumar, moderarse en el consumo de alcohol y otros vicios. Pero la gente se da cuenta que esto también aplica a vicios ‘menores’ como refrescos, azúcares añadidos, y comidas procesadas. Muchas veces nos fijamos en lo que no estamos haciendo lo suficiente, como ejercitarnos. Pere, mientras conocemos que necesitamos deshacernos de los malos hábitos, este acercamiento negativo muchas veces se vuelve desmotivador y difícil de superar.
¿Cuál es la causa de los malos hábitos?
La mayoría de los malos hábitos vienen en respuesta al estrés y el aburrimiento. ¿Haz escuchado del hambre por estrés, o de perder el tiempo en el internet para evitar el trabajo o estar aburrido? Esta solución de corto plazo puede hacerte sentir bien de momento, pero se puede volver en un hábito de largo plazo que puede ser dañino al repetirse una y otra vez. Puede que también estés evitando problemas graves en lugar de resolverlos y superarlos.
También, a veces, los malos hábitos aparecen de la nada y les toma poco tiempo convertirse en parte de tu vida. Al igual que los buenos hábitos, toma tiempo crearlos e incluso los hacemos sin darnos cuenta. Un día sin concientizar lo que comemos puede convertirse en dos, y después en una rutina en la que necesitamos azúcar para sobrellevar el día. Con esto en mente, recuerda que formar buenos hábitos y convertirlos en rutina toma tiempo y esfuerzo conciente.
Es fácil quedar atrapado en los sentimientos y pensamientos negativos que nos causan los malos hábitos. Puedes sentir culpa o disgusto, pero esto no te motivará a cambiar nada. Mejor, intenta descubrir la causa del problema. ¿Qué fue lo que inició o provocó el mal hábito? ¿Cuántas veces lo has repetido? ¿Dónde, con quién y qué estás haciendo cuando caes en él? Analiza estos problemas como un primer paso a solucionarlos.
Reemplaza los malos hábitos por los buenos
En lugar de pensar en lo que no deberías hacer, encuentra el éxito reemplazando los malos hábitos por algo mejor. Esto es un acercamiento más positivo y, potencialmente, el único camino para triunfar con tus esfuerzos. Piensa por qué estás siguiendo malos hábitos. ¿Es por estrés o aburrimiento? Así, cada vez que experimentes una situación causante de un mal hábito, la podrás cambiar por algo mejor. Ten un aperitivo saludable a la mano en todo momento y encuentra una manera de ser más productivo con tu tiempo.
Cuales quieran que sean tus hábitos, siempre ten un plan para evitar los que son negativos. Haz un plan consciente deshaciendote de la comida no saludable y otros vicios que tengas. Cosas tan simples como poner el control de la TV en un lugar lejos de alcanzar harán que dejes de perder horas cambiando de canales en tu sillón. Cambia tu rutina de una manera así de fácil y genera mejores respuestas que serán la base de tu éxito.
Visualiza el éxito y alcánzalo
Sabiendo la raíz de tus malos hábitos, y con un plan en mente, te verás alcanzando tus objetivos. Visualiza cada uno de tus pasos, así como a ti mismo deshaciéndote de tus vicios. Visualiza la mejor versión de ti mismo y compáralos con cómo te ves ahora. Con esta nueva visión positiva, estás listo para que nada te detenga.
Recuerda que esto será un proceso, pero con el poder de una actitud positiva podrás superar los obstáculos en el camino. Acepta los pequeños momentos desmotivadores como oportunidades para reiniciar y volver a construir. Celebra cada éxito y sigue viendo hacia adelante, dejando los errores atrás.
Recuerda que el éxito depende completamente de ti tomando responsabilidad de tu vida. Encuentra lo que necesitas para deshacerte de los malos hábitos y reemplazarlos con los buenos y ponte en marcha. Sí, puedes hacerlo si cada día te diriges en la dirección correcta.
— Jeremy Hall
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