Chunkify es una de mis palabras favoritas en inglés. En resumen, es una palabra divertida que significa dividir las cosas en partes más pequeñas que son más fáciles de manejar, lo que se conoce como desglosar en español. La primera vez que me enteré de la idea de fragmentar fue con números. Por ejemplo, piensa en la forma en que se presenta un número de teléfono en partes separadas porque a nuestros cerebros les resulta más fácil recordarlos en los segmentos de 3 y 4 números en lugar de una sola secuencia larga. Verás que lo mismo sucede con otros números que deberíamos recordar, como el Número de Seguro Social, la Tarjeta de Crédito, etc.

Así funciona nuestro cerebro y cuando nos adaptamos a cómo nuestro cerebro puede operar de manera más eficiente, generalmente encontramos un mayor éxito en lo que estamos tratando de lograr, incluso si es más que solo memorizar una secuencia numérica.

Apliquemos esto a otras áreas de la vida. ¿Dónde puedes ver resultados cuando divides una tarea grande en partes más pequeñas? Bueno, la respuesta obvia aquí se trata de tus metas de salud y negocio. Es genial para nosotros tener una visión a largo plazo de dónde queremos estar y lo que queremos lograr. Necesitamos tener esos objetivos frente a nosotros en todo momento para recordarnos por qué estamos haciendo un esfuerzo diario para seguir trabajando en esa dirección. Pero si nuestras metas más grandes se establecen correctamente, no es algo que vayamos a lograr en un día, semana o incluso en los próximos meses. Necesitamos establecer metas más pequeñas que podamos lograr y celebrar nuestros progresos en el camino. Así es como funcionamos mejor.

Digamos que tienes la meta de perder una cantidad específica de peso o de llegar a cierta talla o ponerte cierto tipo de ropa. Para algunos, este puede ser un objetivo pequeño, pero para muchos puede ser algo que sucederá a largo plazo. Establece esa meta y pónla en tu espejo para que la veas todos los días a manera de recordatorio. Pero también establece tus metas del aquí y ahora. Decide qué vas a hacer esta semana en tu trabajo y qué objetivos debes lograr para obtener progresos que te lleven en la dirección correcta. Averigua lo que es razonable para el primer mes, el segundo y más allá para alcanzar tu meta final. Ahora pónlo junto a tu meta a largo plazo y trabaja en pro de la meta más cercana. Todo funciona en conjunto, pero necesitamos esos objetivos más pequeños e inmediatos para mantenernos enfocados y tener una sensación de éxito que nos mantenga motivados.

Puedes hacer lo mismo en tu negocio y en otras áreas de tu vida. Decide cuántos productos te gustaría vender y las personas que necesitas para que se unan a tu organización y te ayuden a alcanzar tus objetivos financieros. Comprende que tomará tiempo y esfuerzo para llegar allí y luego convierte esa gran meta en metas más pequeñas y graduales en el tiempo y que puedes lograr con un compromiso y esfuerzo adicionales. Sabes que puedes cumplir con esas micro-metas, y cuando lo hagas, eventualmente alcanzarás esa meta mayor.

Incluso si no cumples algunos de tus objetivos objetivos más pequeños, puedes revisar y ajustar tu estrategia a medida que avanzas. Esa es la belleza de dividir tus metas grandes en más pequeñas. Saber dónde te encuentras y evaluar tu progreso te permite redefinir tus expectativas si es necesario, o aumentar tus esfuerzos para volver al buen camino si es posible. Todo depende de ti.

No hay mejor momento que ahora para evaluar tus objetivos a largo plazo y determinar qué necesitas para lograrlos. Pregúntate si realmente quieres lo que representan esos objetivos y si estás dispuesto a hacer lo que sea necesario para alcanzarlos. ¡Luego desglosa esas metas y configura tu propio plan y micro-metas para llegar allí!

 

Acerca de ORGANO

Fundada en el 2008 como Organo Gold, ORGANO está dedicado a llevar los beneficios y riquezas nutricionales de la tierra a la gente a través de sus productos premium que pueden ser usados diariamente para lograr un estilo de vida más energético y saludable.

Previous Post
Next Post